La tecnología 5G es la nueva frontera tecnológica que vamos a alcanzar en «breve». Con velocidades de conexión desconocidas hasta el momento, permitirán lo que se conoce como el internet de las cosas
La Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) ya ha fijado el estándar del 5G en velocidades de 20 Gbps. Esto quiere decir que la velocidad real de las conexiones de los usuarios podría llegar a unos 1000 Mbps. Como dato, la velocidad máxima teórica del 4G+ es de 300 Mbps.
¿Y en que afectará esta nueva tecnología en nuestra vida cotidiana?
La ultra velocidad que se conseguirá con esta nueva tecnología permitirá un mundo hiperconectado, la mayoría de aparatos electrónicos se conectarán entre si y en muchos casos podrán, a su vez, reconocer otros elementos que no estén «conectados». Como también la domótica alcanzará otro nivel, las máquinas podrán «tomar decisiones de forma autónoma» en función de datos o parámetros que a su vez pueden estar obtenidos de otros dispositivos, todo de manera autónoma, inmediata, y sin intervención humana, las cámaras de videovigilancia podrán conectar a mayor velocidad con el usuario, y es muy probable que en un futuro puedan reconocer personas y objetos con todas las ventajas que ello puede suponer.
El único pero a esta tecnología es su elevado coste de implementación se estima que la instalación de esta tecnología en toda Europa tendrá un coste que oscilará entre los 500.000 y 600.000 millones de €. sin duda un gran desembolso que retrasará su implementación definitiva.